La etapa de la lactancia suele ser dejada de lado como prioridad debido a que ya tenemos a nuestro cuidado al recién nacido. Mientras que durante el embarazo destinamos gran parte de nuestro tiempo y energía a comer balanceado, tomar nuestras vitaminas, y beber suficiente agua, pareciera que en el momento en que nace nuestro bebe olvidamos que seguimos siendo su principal fuente de nutrientes a través de la lactancia materna.

Es fácil olvidarnos de cuidar nuestro cuerpo, dormir suficiente, e hidratarnos, cuando hay tanto por hacer para mantener a nuestro pequeño sano. Pero debemos recordar que los cuidados durante la lactancia derivaran en un bebe sano y bien alimentado.

Hidratarse

Durante la lactancia la demanda de líquidos aumentará, por lo que resulta importante beber suficiente agua para satisfacer la sed. 2 litros de agua al día son recomendables, también consumir alimentos con alto índice de agua, como la sandía, sopas, leche, o te. Evitar bebidas azucaradas ayudará en la recuperación y a mantener un peso saludable.

Alimentación

La principal forma de asegurar que nuestro bebe recibe todos los nutrientes necesarios es a través de la alimentación balanceada de la madre. Cabe señalar que durante la lactancia debemos llevar una dieta variada y rica en nutrientes, similar a la del embarazo. No es necesario aumentar las porciones, ya que la producción de leche no requerirá mayor número de calorías al necesario durante el embarazo.

Es importante mencionar que ningún alimento aumenta la producción de leche, como muchos mitos nos hacen creer, por lo que el consumo de leche de vaca, cerveza, o atoles no debe fomentarse. La producción de leche se encuentra directamente ligada a la demanda.

La madre deberá incluir abundantes vegetales, variedad de frutas, proteínas, carbohidratos y grasas buenas. Realizar tres comidas al día y colaciones que incluyan nueces y semillas. Además de una gran cantidad de líquidos.

Los únicos alimentos que se deben limitar son aquellos que contienen grandes cantidades de cafeína, como las bebidas energéticas. El consumo moderado de café y té no debería representar un problema, una a dos tazas por día. También los pescados azules con alto contenido de metales pesados como el pez espada, atún rojo, tiburón, mejillones y lucio. Estos pescados se pueden consumir en cantidades de 120 gramos al mes de acuerdo con la Asociación Española de Pediatría.

Evitar el consumo de alcohol y tabaco

Evitar el consumo de alcohol es necesario durante esta etapa, ya que el alcohol se considera incompatible con la lactancia, y puede afectar negativamente la salud del bebe. En caso de consumirlo se recomienda que sea en cantidades pequeñas (60 mililitros) y evitar amamantar durante las siguientes 3 horas. El colecho tampoco se debe practicar después de beber alcohol. De igual manera se recomienda evitar el consumo de tabaco debido a los efectos nocivos del humo sobre la salud del recién nacido.

Descanso

Por complicado que parezca la madre en periodo de lactancia deberá tener un adecuado descanso para que su cuerpo logre satisfacer sus necesidades y además producir suficiente alimento para él bebe. La práctica del colecho resulta en una excelente opción para madres que amamantan, ya que permite que la madre descanse mientras alimenta al bebe.

La lactancia materna trae innumerables beneficios para nuestros pequeños, pero siempre debe ser decisión de la madre llevarla a cabo, puesto que supone un gran esfuerzo de su parte. Debemos además contar con buen soporte a nuestro alrededor para llevar a cabo una lactancia materna exitosa, ya que es un trabajo en equipo. La madre que amamanta deberá recibir apoyo de su pareja, familia cercana, y especialistas de lactancia en caso de ser necesario. El principal cuidado que debemos llevar durante la lactancia es el de nuestra persona y siempre respetando nuestros deseos con respecto a la duración.